Tirando de su carro el alba
viene repleta de ilusiones,
cascadas de palabras,
prestas las bocas a recogerlas
para dar forma al sueño
juntadas como nubes
que el viento agrupa,
para descargar en tropel
a la tierra ansiosa y reseca.
Es el comienzo de todo,
Yendo más allá de nuestros sueños,
haciendo realidad todo lo ansiado.
Los muros alargan su sombra
El ocaso va recogiendo,
la caída de la tarde
que apaga suavemente la luz.
Un telón cayendo de improviso,
anuncia el final del último acto.
¡No está aún dicha la última frase¡
La oscuridad va arrastrando las palabras,
solas, revueltas, sin destino.
Las grietas del tiempo las sumerge,
en un rescoldo a la espera,
que una brisa con la aurora,
como pétalos dulces y ligeros,
avive el fuego primigenio,
que ilumina nuestros sueños.
