Piedras oscuras, gastadas ,
Ahora tumbadas sobre el suelo
en un desorden incomprensible,
columnas, sin órdenes,
con sus veinticuatro acanaladuras
alrededor de su cilindro,
separadas en tambores
mostrando su eje,
sustentaban pórticos majestuosos
de entrada al recinto del dios,
tallado en finísimo mármol blanco,
interpretado por el martillo y el cincel,
asumido rápidamente por las mentes
deseosas de cambiar,
dioses lejanos en el espacio,
por otros de figuras más humanas,
yacen también desparramados,
mutilados e irreconocibles,
perdida ya toda devoción,
sustituidos por otras deidades,
a imagen de los mortales

3me parece precioso, espero ver más. Gracias
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No se la razón pero me han gustado
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