¿Puede alguien compararse con el viento?
Azul sin tener color cuando se expande por el cielo.
Húmedo cuando llueve y se escabulle entre las gotas.
Verde acariciando las hojas del bosque.
Amable cuando hinchando la blanca vela
desliza la nave sobre las arrugas de la mar.
Se hace suave brisa que refresca a la diminuta hormiga
subiendo afanosamente por el tronco del árbol.
Mueve la flor, ayudando a expandir su polen
llevando la fragancia, también trasparente,
hasta inusitados y recónditos confines.
Sientes su caricia, cuando hace calor y te refresca.
Huyes, cuando gélido, atenaza el gesto en la cara.
Viajero de todos los confines a donde llega.
Impetuoso muchas veces doblegando árboles.
Revolviendo a su paso todo lo que encuentra,
indicio único de su existencia.
Invisible como los dioses.
Benévolo y dulce final de vida.
Y cuando notamos su ausencia, parado está,
a la espera que nosotros lo provoquemos
con nuestros alocados movimientos,
para sentirlo refrescante en nuestro rostro.
Bonito poema al viento. 👏👏💐💐🌞✨
Me gustaMe gusta