Vuelo

En el aire de la tarde, 
adentrándome en caminos inexistentes,
flotando en el misterio de la nada
como un Icaro sin alas.

Abajo
lo conocido,
se hace minúsculo,
dominable,
poca cosa.
Arriba
todo sigue igual:
lejano,
inmenso,
sin trabas,
abierto a todas las posibilidades.

Por ahí está la salida.

No es cierto
que no podamos volar alto,
"si vuelas alto se derretirá la cera de las alas".
No las necesitamos,
podemos volar sin ellas,
podemos volar sin dioses,
podemos volar juntos.
Hay estrellas para todos.

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